martes, 12 de febrero de 2013

Venus y la Sagrada Familia

Venus

Venus, la Diosa del Amor en el mundo griego, Afrodita para los romanos es la misma Isis de los egipcios. Según la mitología, inspiró a Paris para que la eligiera como la más hermosa entre Atenea (Minerva) y Hera (Juno). Pero ya de mucho antes Venus era protectora de los troyanos. Guió en su camino a Eneas desde Troya hasta la fundación de Roma. Por esta razón Venus es la diosa predilecta de la Gens Julia. El Cáesar era considerado hijo divino de Venus. 

El nacimiento de Venus

Venus está relacionada con el toro. Venus representa el amor de la mujer y el toro representa la fuerza. La correspondencia de esta relación se encuentra claramente explicada por la astronomía: Venus rige en Tauro.
La cultura latina siempre ha estado muy relacionada con el toro. Podría decirse que por donde va la cultura latina queda evidencia del toro. La cultura latina es descendiente de la antigua Atlántida de la que habla Platón. Las estrellas Pléyades forman parte de la constelación Tauro. Las Pléyades eran las hijas de Atlante y Atlántida. De la Atlántida, los latinos, eternos navegantes, fundaron numerosas colonias en el mar Índico y el Mar Mediterráneo. De ahí que en la India hasta hoy el toro es considerado un ser divino. Del mismo modo, en la penísnula de Anatolia, actual Turquía, se encuentran los montes Taurus, en cuyas costas mediterráneas siempre se ubicaron colonias  latinas. La cultura latina llega a América oficialmente a fines del siglo XV y con ella el toro. En México, Colombia, Venezuela, Ecuador  y Perú se realizan corridas de toros  en casi todos los pueblos y ciudades, mientras que en Brasil, Paraguay, Argentina y Uruguay el ganado bovino es parte muy importante de la cultura y de la economía

 Cuernos del toro a los pies de la Virgen de Guadalupe


Venus, Isis, Ishtar, Afrodita son diferentes personificaciones del mismo culto a la madre. En la antigua Roma el culto a la madre estaba representado por un aspecto de Venus,  la estrella del amanecer, en Mater Matuta, la madre del hogar, en cuya fiesta celebrada el 11 de junio, día también de la Gens Julia, se festejaba el día central de la Matralia, fiesta de las Vestales del Templo Sagrado y fiesta del hogar, de la familia, y de las madres y sus hijos. Las Vestales guardaban el fuego sagrado de Roma, el fuego que nunca se apaga, dícese guardado por los latinos desde tiempos inmemoriables. 

Venus

Con la cristiandad  el mundo latino cambió el culto de Venus, Afrodita, Isis o Ishtar por el de la Virgen María, la madre de Jesucristo. Pero siguieron conservando el modelo de la familia latina: un papá, una mamá y sus hijos. En la época de Jesús no todas las culturas organizaban sus familias según este modelo. Los pueblos primitivos organizaban sus familias según sus costumbres: varias madres, o varios padres en una sola familia. La cristiandad civilizó Europa desde Roma hacia Francia, Alemania, Rusia e Inglaterra. Y consigo llevó la familia cristiana, ejemplificada en la Sagrada Familia: San José, la Virgen María y el niño Jesús. 
La SAGRADA familia